La semana pasada, leí una pequeña nota en Le Monde Magazine que no
sé si me entretuvo o me estremeció.
Una funeraria estadounidense en el estado de Michigan,
propone un nuevo servicio « drive-in »para que las familias puedan
despedirse de sus fallecidos de manera muy rápida. El conductor y los ocupantes
del coche disponen de tres minutos para contemplar por última vez el féretro
abierto desde el otro lado de una ventana, tal como sucede en los sitios de
compra de comida rápida. Al cabo de los tres minutos, se cierran las
cortinillas automáticamente y un vehículo fúnebre se lleva la caja hasta su
destino final.
¿Todo muy limpio, no? ¿En qué sociedad vivimos si
tampoco somos dueños de nuestras despedidas, si hasta las últimas despedidas
que tenemos con nuestros fallecidos tienen que ser rápidas y cronometradas,
desprovistas de toda emoción?
http://www.publimetro.com.mx/vida/funeraria-crea-ventanilla-para-despedirse-de-fallecidos-desde-el-auto/XeSnir!tnt4SQKnYJeGb_QSaQpuDg/
1 comentarios:
...en una sociedad en la que el tiempo es oro, y vale más que la vida humana, desgraciadamente. ¿qué tal si hoy nos paramos cinco minutos y miramos a nuestro alrededor?
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